Queridos Magos de Oriente,
Ya se que la cosa no está muy dicharachera, económicamente hablando, así que intentaré controlarme en los deseos que incluya en esta carta.
Por pedir os pediría muchas cosas pero me centraré en aquellas que son más factibles, o al menos personalmente deseo que lo sean.
Dicen que este año todavía será más duro que el anterior y que los ajustes pueden afectar a más puestos de trabajo. Hoy seré egoísta y miraré hacía nuestro mundo, el del fotoperiodismo, muy castigado en los últimos años y con muchos amigos sin trabajo, así que, a poder ser, intentar que la crisis mire hacia otro lado que este ya está muy tocadito. Gracias.
Si podéis hablar con los políticos que pueblan el Congreso de los Diputados, comentarles que eso de hacer fotos a sus móviles o a sus papeles siempre se ha hecho por aquello de la libertad de información, que no es nada nuevo y no hay que ponerse tan nervioso ni alterado, que cuando a ellos les interesa bien que filtran informaciones… hay que ver lo traviesos que son.
Cuando paséis por Japón, darles prisa a los señores de Fuji para que no tarden en mostrar esa X-1 Pro o como quieran llamarla. ¡¡¡Que nos tienen en ascuas!!!!!!
De paso, echarle un poco de polvo mágico al sistema AF de Canon para que esa 1-X ofrezca lo que todos esperamos de ella.
A todos los jóvenes fotógrafos que inician sus primeros pasos en esta profesión, un buen saco de fuerza y paciencia. La cosa está muy malita pero nunca hay que abandonar el barco. Sobre todo no os olvidéis de ellos.
A los que viajan por ahí, a sitios de conflicto, cuidarlos como ángeles,
A todos los colegas de profesión, una caja portátil repleta de buena luz,
A lo que serán Papas, dosis de ternura,
A los amigos, aquellos que siempre están, barra libre.
y a mis dos Princesas, salud y amor.
En fin, que tampoco pido tanto, incluso creo que podéis traerlo todo con una sola caravana.
En casa tendréis como siempre turrón y cava esperando vuestra llegada, y también comida para los camellos, como no.
Ser buenos y no me seáis infieles.
