El 18 de noviembre de 1994, el pequeño Nermin Divovic fue abatido por francotiradores serbios en Sarajevo.
La fotografía de Fabienne que mostré en el anterior post, me recordó en cierto modo a esta otra imagen realizada por Enric Martí durante el conflicto balcánico.

Durante estos dos últimos días, he hablado con diversos fotógrafos sobre el tema que planteaba, llegando todos a la misma conclusión. Ellos, y aquí también me incluyo, hubiéramos tomado la imagen.

Esta conclusión puede llevar a error si la analizamos banalmente y sobre todo si tenemos presente la imagen de los fotógrafos inmortalizando la escena.

En un primer momento, este tipo de imágenes nos hacen parar, recapacitar y auto analizarnos. Al verlas, el trabajo de un fotoperiodista puede quedar fácilmente menospreciado y es entonces cuando las famosas teorías sobre el “Circo Mediático” toman el protagonismo en valoraciones y opiniones surgidas desde la distancia y el desconocimiento de las circunstancias.
Imaginemos por un momento la situación. Nos encontramos en Haití, fotografiando, entre otras muchas cosas, los saqueos que se están llevando a cabo. De repente oímos un disparo, nos dirigimos al lugar y nos encontramos con el cadáver de la pequeña Fabienne, asesinada por el disparo de un policía. ¿No realizaríamos la fotografía?
Imaginemos incluso que llegamos los primeros al lugar de los hechos y con el paso de los segundos van llegando el resto de fotógrafos que hay por la zona, llegando a completar el grupo de los seis que aparecen en la imagen. Lógicamente reaccionarán igual que nosotros, y fotografiarán el hecho, la noticia.
La fotografía de Enric Martí fue difundida por AP y publicada en multitud de medios de comunicación. Era la imagen del día y a través de ella vimos una muestra más del asedio mortífero que sometió el ejercito serbio a la población civil de Sarajevo.
¿Estaba solo Enric o por el contrario habían más fotógrafos? ¿Hubiera cambiado algo en el caso de encontrarse en ese momento cuatro o cinco fotoperiodistas realizando dicha imagen?, ¿tildaríamos a esos profesionales de carroña en el caso ser fotografiados haciendo su trabajo?
Hace escasa semanas, TV3 difundió un reportaje sobre el atentado que sufrió el Cuartel de la Guardia Civil de Vic hace ahora unos años y donde murieron varias personas, entre ellas, algunos niños. Entre los testigos del programa, entrevistaban a Pere Tordera, fotoperiodista que tomó la imagen del guardia Civil con una niña en los brazos, declarando que hubiera preferido no hacer nunca esa imagen pero que era su trabajo. Su sinceridad y claridad en la respuesta era absoluta y llena de profesionalidad y respeto.

En cuanto al hecho de intentar esquivar la presencia de otro fotógrafo dentro de la toma es algo normal, Sucede aquí y sucede allí y en mi opinión no debe ser traducido como una intención de mentir y mucho menos de manipular.
¿Sería más ético tomar la imagen de Fabienne si hubiéramos estado solos en lugar de hacerlo junto a otros fotógrafos? Sinceramente creo que no, ni creo que tenga cabida la palabra "Etico". Otra cosa muy distinta hubiera sido provocar la situación o incluso mover el cadáver para tener una mejor luz o composición como desgraciadamente ha ocurrido en alguna ocasión. Prensa "carroñera" existe, claro que si pero no en este caso.
Ni Enric en Sarajevo ni el grupo de fotógrafos en Haití mataron a los pequeños. Estaban allí. Realizando su trabajo que no era otro que el de informar y dar luz a una atrocidad más del ser humano.
(Es este un post que responde a una opinión personal, al igual que todos los comentarios que hicisteis en el pasado artículo y que una vez más quiero agradecer, tratándose de un tema tan delicado)